viernes, 26 de abril de 2013

Crónica de OMExpo 2013: la era mobile y los nuevos formatos de producto

OMExpo se ha convertido, por derecho propio, en uno de los eventos de referencia para el sector del marketing y del ecommerce. Esta edición se ha saldado con un rotundo éxito de público (a falta de cifras oficiales, en las redes sociales se hablaba de miles de asistentes) y una sensación clara de que el negocio digital puede ser un negocio rentable.

Son las posibilidades de desarrollo las que atraen, cada vez más, a emprendedores e inversores. Un gran número de los expositores de la edición de 2013 han sido startups, muchas de ellas con propuestas verdaderamente interesantes. Surge la duda de si esas startups consiguen generar nuevo negocio en este tipo de ferias; tal vez en próximas ediciones se puedan generar más eventos y oportunidades formales de networking


Sala Accenture - OMexpo
Sala Accenture -OMexpo 2013
En cuanto a los seminarios y presentaciones en salas, era tanta la oferta, que resultaba complejo elegir a qué cita acudir. La mayor parte de las ponencias a las que he podido asistir han sido extraordinariamente interesantes, pero he visto alguna que lo era menos, y que se cerraba a los 15 minutos de su comienzo con un "esto lo hacemos nosotros muy bien". Evidentemente, las empresas deben aprovechar esos momentos, pero no es sencillo hacerlo. Demuestra tu expertise y no necesitarás venderte. No lo hagas directamente salvo que seas un portavoz excepcional, trabajes en una empresa excepcional o tengas un producto excepcional. Vamos, salvo que seas Stephen McIntyre, tengas aire de rockstar y vengas a contar las soluciones de pago de Twitter. A mi entender, McIntyre protagonizó la presentación estelar del del día 24. Si alguien tenía dudas de que Twitter está aquí para arrasar, las despejó esa tarde: visión certera del mercado, claridad en las propuestas.

De todo lo demás que pude ver, no puedo por menos que felicitar a The Valley porque sus seminarios han sido el ejemplo de que se pueden plantear minitalleres con cierta profundidad, ponentes interesantes y espíritu emprendedor. Muy interesantes también el seminario de Marketing de afiliación a cargo de Daniel González, de Zanox y la presentación de Cristina Rosa sobre SAP, pero puedo decir que el evento que más me sorprendió fue la mesa redonda sobre convergencia digital y tendencias móviles. Si hay una conclusión que podría extraerse de este congreso es que las grandes oportunidades de negocio van a llegar a través de los dispositivos móviles. Hernán Rodríguez (CEO, AECOMO), Javier Pérez Dolset (CEO de Zed) y Eduardo Fernández (Presidente para España y zona mediterránea de Blackberry) analizaron las posibilidades de la era mobile y el nuevo formato de producto que se ha impuesto (el producto como un ecosistema, no como algo limitado). Buen análisis y gran visión estratégica por parte de los 3.

Mi valoración general de la Feria ha sido muy positiva. Había ambiente de fiesta y eso es un buen síntoma. Hay muchos y muy buenos profesionales del eMarketing y el eCommerce presentando proyectos punteros y, sobre todo, rentables. ¿La mejor noticia de todas? Que en septiembre vuelve OMexpo en versión ampliada y mejorada: OMexpo Week. 5 días en Madrid y 5 en Barcelona, cada día especializado en una temática concreta. Anótenlo en sus agendas, merecerá la pena.  

lunes, 22 de abril de 2013

Sobre la música independiente y las etiquetas

Hace poco leí en una revista francesa, Femme actuelle, una entrevista a una mujer que había perdido a dos de sus hijos en un incendio en su casa. De sus frases, hubo una que me impresionó (libremente traducida): "hay una palabra para designar a la mujer que pierde a su marido, viuda, hay una palabra que designa a la hija que pierde a un padre, huérfana, pero no hay una palabra que represente a la madre que ha perdido a sus hijos". 

Lo que no tiene un nombre no existe. El ser humano necesita clasificar, etiquetar, ordenar, aunque sea mínimamente, el caos que le rodea. Necesitamos poner nombre a todo, incluso al dolor. A veces nos etiquetan, a veces nosotros mismos nos etiquetamos. Desde el "yo soy rocker, tú eres mod, él es heavy" de finales de los 80, al "yo soy tuitero, tú eres instagrammer" del 2013.

David Fonseca y Alberto de Miss Caffeina
El viernes 19 estuve invitada a un concierto por cortesía de VIM Magazine. Un portugués que canta en inglés, que es compositor, que dirige sus vídeo clips, y que publica libros de fotografía. Además de un tipo genial, David Fonseca es absolutamente inetiquetable. En Portugal es un fenómeno de masas, un artista de los denominados mainstream; en España es un músico apenas conocido, y se le relaciona con músicos de la escena indie. Él ha mencionado en varias ocasiones su cercanía a la música de Russian Red, un claro ejemplo de lo que podríamos denominar como indie-mainstream.

Se señalan de Fonseca sus múltiples influencias, Morrisey, Keane (a los que teloneó), David Byrne, Pixies..., aunque por su elegancia a mí siempre me recordó a Bryan Ferry. Sin embargo, el músico exquisito sacó la guitarra en Joy Eslava y se marcó un concierto ruidoso, rockero y extraordinariamente divertido. No pudo lucir su impresionante voz tanto como en su concierto en la FNAC de mayo de 2012 (la acústica y el formato lo impedían), pero arrastró al público a bailar con las canciones de su último (y doble) disco, Rising-Falling. Fantástica la parte estética, con una esfera gigante con proyecciones y numerosos cambios de luz. Lo mejor de la noche, sin duda, la canción que el luso interpretó con Alberto, cantante de Miss Caffeina; dos voces muy diferentes que juntas sonaban magníficas. La parte melancólica la puso la telonera, Lucía Scansetti, un interesante descubrimiento.

Etiquetar, ya lo saben, sirve para entender el mundo más claramente, para comunicarnos más fácilmente, para ahorrar esfuerzo. Por ejemplo, esto es una crónica de un concierto o, si lo piensan dos veces, tal vez no.


jueves, 11 de abril de 2013

Comienza ZINK SHOWER, el primer meeting-show de las industrias creativas en Madrid

Comienza en Madrid ZINK SHOWER, una reunión donde se presentarán los proyectos creativos y culturales más transformadores del momento, donde los emprendedores también tendrán su espacio. Durante 3 días, más de 270 actividades llenarán Matadero Madrid de nuevas ideas y propuestas: más de 40 charlas, 25 encuentros profesionales de networking, 40 workshops, 12 talleres específicos sobre herramientas tecnológicas... 

El formato de meeting show permite que esta cita sea un punto de encuentro entre emprendedores e inversores. En ZINK SHOWER los inversores pueden conocer de primera mano proyectos punteros en los que invertir, seleccionados a través de la convocatoria a la que se presentaron casi 900 propuestas. Están representados distintos sectores de esta industria: artes audiovisuales, sector editorial, software, arte y diseño, publicidad, moda, videojuegos...

Además, de forma simultánea se desarrolla la parte más lúdica y creativa del evento, como la exhibición de procesos creativos en formato reducido, los espectáculos basados en la improvisación y la creación colaborativa (Forever Jam), o maneras originales de presentar  o defender un proyecto de manera pública, como Pecha Kucha o las peleas de gallos.

El precio de las entradas es a partir de 10 euros hasta abonos de 110 euros. Se venden a través de zincshower.com y existen precios especiales para estudiantes y desempleados.